El amazigh, también conocido como bereber, es un conjunto lingüístico autóctono del Norte de África, incluyendo las Islas Canarias. Mientras que en amplias regiones continentales fue sustituido por el árabe, en el Archipiélago fue suplantado por la lengua castellana impuesta por los conquistadores europeos desde el siglo XV. La población canaria originaria, conocida como guanches, sufrieron un proceso de colonización que forzó la castellanización y estigmatizó la cultura nativa considerada por los europeos como bárbara.
A pesar de la asimilación forzada, la tradición oral de la población propició la conservación de un sustrato lingüístico destacable en el actual dialecto canario del castellano. Estas pervivencias no sólo posibilitaron el desarrollo de investigaciones científicas sino también la lengua como elemento identitario. El amazigh resurge, y aspira a impugnar el relato eurocéntrico de la canariedad, reconstruyendo vínculos con África más allá de retóricas paternalistas.