Desde finales del siglo XX y claramente en lo que va del siglo XXI, las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) no sólo se han expandido exponencialmente en el mundo sino que también han impactado numerosas esferas de la vida de las personas. El continente africano está experimentando una importante aceleración digital en muchos niveles, interconectando estructuras, procesos y actores locales y globales, apareciendo así múltiples desafíos y oportunidades para la transformación digital y socioeconómica de África. Algunas de estas oportunidades y desafíos estarían vinculados al propio desarrollo y compatibilidad sociocultural para el crecimiento socioeconómico en esta región del mundo, ya que el acceso de las poblaciones africanas a los servicios digitales (financieros, comerciales y de marketing, medios y recursos) no necesariamente les beneficia, incluso si ofrecen alternativas potencialmente viables, efectivas y relevantes para el autoempleo, entre otras. Las estrategias económicas y de cooperación de los gobiernos europeo y español (Cumbre UE-Unión Africana 2020, Foro Empresarial UE-África 2020, Agenda España Digital 2025, Agenda 2030, etc.) están en sintonía con las opciones que ofrece la digitalización tecnológica en términos de acceso a la información , contactos, innovación y oportunidades para generar mayor igualdad y desarrollo. Así, en los contextos locales el uso de la tecnología móvil ha tenido una importante expansión que va desde el entretenimiento al pago de facturas e intercambio de bienes. La disponibilidad generalizada de teléfonos inteligentes y el fácil acceso a las plataformas de redes sociales, ha favorecido el acceso a una plétora de información sobre temas que van desde las noticias y los cotilleos hasta la moda y cuestiones sociales o políticas favoreciendo por ejemplo a los movimientos sociales oportunidades de activismo que antes no tenían a su alcance (Kibona y Mohamed, 2023). Al mismo tiempo, la brecha digital de género o la falta de infraestructuras digitales persiste en muchos países del continente africano. Diversos factores contribuyen a ello, tales como la falta de acceso a la infraestructura tecnológica, la alfabetización digital limitada, la falta de modelos y referentes femeninos en el sector tecnológico, o la violencia de género en línea.
En este contexto nos interesa conocer y debatir cómo las poblaciones utilizan las plataformas digitales para crear comunidades, negocios y movilizarse para cuestionar las injusticias, poner de relieve y obtener reconocimiento y derechos sobre diversas cuestiones de interés individual y colectiva. Prestar atención a los procesos políticos e históricos y a la escala de género en el acceso y uso de los medios digitales invita a los investigadores a reconocer las cuestiones de soberanía y poder más allá de los discursos optimistas sobre el empoderamiento digital de género, y a seguir los procesos complejos, parciales y ambiguos de la gestión de la información y el conocimiento a través de los medios (Nanna Thorsteinsson Schneidermann, 2023).
También estamos abiertas a conocer los debates actuales sobre la llamada descolonización tecnológica desde las epistemologías africanas que critican las lógicas cartesianas sobre la predictibilidad (Divine Fuh, 2023) y otros valores epistémicos, con la idea de africanizar el conocimiento a la historia de la tecnología (Twagira, 2020).
Concretamente las discusiones a abordar en este panel se centran en estas dos preguntas clave:
i) ¿Cuáles son los avances recientes en los procesos africanos de digitalización del continente?
ii) ¿De qué manera las poblaciones africanas dan forma propia a estos procesos de digitalización globales?
iii) ¿Es posible hablar de descolonización de los procesos digitales y tecnológicos en el continente a partir de epistemologías y ontologías propiamente africanas?